"Cuando María Romero llegó a Jesús Malverde, el vacío que dejó su padre, de quien conserva sólo una fotografía, fue llenado por la imagen del Bandido Generoso. Su rostro se metió en sus lienzos y sus dibujos, comenzó a figurar en los objetos y ahora la imagen de ese padre la busca incansablemente.
"Hasta la saciedad, hasta el cansancio, hasta que me agote, hasta no verte Jesús mío…"
La búsqueda inició Culiacán, su ciudad de origen, pero ha llegado a otras partes del mundo. La más reciente fue en Madrid, en enero, donde tomó las calles para exhibir una serie de carteles con ese rostro.
Es el proyecto Hasta no verte Jesús mío, una colección de retratos hechos por amigos de diversas profesiones, vidas, costumbres y hábitos, que le ayudan a enriquecer su imaginario, a encontrar la imagen real de ese personaje a quien llama padre.
"Esa búsqueda empieza desde mi infancia y sigue hasta el día de hoy, por eso he pedido que me ayuden, con sus ojos y su corazón, a sanar mi alma y me den una imagen de mi padre de adulto"... VER NOTA COMPLETA
Texto: Nelly Sánchez
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